Trastorno alimentario

trastorno de la conducta alimentaria

Preocupación por la imagen o trastorno alimentario?

La preocupación por la imagen es normal. Desde siempre, el deseo de sentirse atractivo, deseado y aceptado ha formado parte de la condición humana. El problema suele empezar cuando pensamos que la única forma de ser deseado es a través de la imagen corporal y sobre todo, cuando pensamos que esto solo pasará si conseguimos una imagen muy concreta. Si a todo esto le añadimos que nuestra autoestima depende en una parte muy importante del hecho de sentirnos o no atractivos, es probable que estemos ante un trastorno alimentario .

Algunos indicadores de salud mental en temas de imagen corporal serian:

  • Tener otros objetivos o motivos de satisfacción qué no tengan que ver con la imagen corporal.
  • Dedicando esfuerzos para conseguir un mejor estado físico, pero sin culpabilizarnos cuando nos saltamos las rutinas alimentarias o deportivas que nos habíamos marcado.
  • Sentirnos satisfechos si hemos conseguido hacer las rutinas mencionadas, pero sentirnos igual de satisfechos si conseguimos otros objetivos.
  • · No tener estos temas muy presente en nuestra mente. Podemos pensar en esto cuando empezamos a preparar la comida o cuando estamos a punto de una actividad deportiva, pero una vez finalizada se nos aparecen otros muchos temas a nuestra mente.

En que se parecen y diferencian la anorexia nerviosa y la bulimia nerviosa?

Se trata en ambos casos de un trastorno alimentario y tienen muchas características en común. Los síntomas que ambos trastornos comparten son los siguientes:

  •  Tener como parte central de nuestra valoración y autoestima el número que marca la báscula, la figura que vemos al espejo y la capacidad para controlarlos.
  • Hacer muchos esfuerzos para bajar el peso acompañado por un miedo intenso a volver a subir de peso.
  • Facilidad para confundir determinados estados físicos y emocionales con encontrarse / sentirse grasos.
  • Mirarse y pesarse con mucha frecuencia o justo al contrario, evitar hacerlo al máximo.

Por otro lado, el síntoma que supone una mayor diferencia es que a la anorexia predomina una restricción de la ingesta de comida y en el caso de la bulimia la persona tiene episodios de ingesta voraz recurrente sin control que necesita compensar de alguna manera (vómitos, laxantes, etc.)

¿Cómo empieza todo esto?

El trastorno alimentario empieza cuando hay un periodo en el cual se hace una dieta o restricción estricta. Esto te acaba llevando necesariamente por uno de los dos siguientes caminos:

  • Tener un episodio de ingesta voraz a causa del tiempo que hace que no comes la cantidad adecuada.
  • En caso de resistir esta tentación, entrar en el que se llama síndrome de inanición. La falta de una alimentación suficiente y correcta, te hace entrar en aislamiento social, conductas obsesivas (como el perfeccionismo y la rigidez) y cambios gastrointestinales.

En el primer caso, el episodio de ingesta hace que la persona se sienta mal e incapaz de controlarse a sí mismo. Muchas veces esto va seguido de una conducta purgatoria, como por ejemplo el vómito o el uso de diuréticos que hace que se eliminen los nutrientes y las energías, lo cual hace que sea más probable que la persona vuelva a tener hambre.

En el segundo caso, la persona empieza a valorarse a sí mismo en base a esta capacidad de resistir la tentación. A pesar de que momentáneamente la persona se siente satisfecha, el cuerpo no puede estar con tan pocos nutrientes, lo cual producirá probablemente una ingesta extra de comida. Esta bajará la sensación de control y la autoestima de la persona, exagerando su necesidad de controlarlo todo.

Que puedo hacer si me pasa esto?

Si esto te pasa te aconsejaría comunicarlo a algún familiar o amigo. Es importante que tengas el apoyo necesario como para poder empezar a hacer pasos o para que te ayuden a tener la valentía de ir a terapia. A pesar de que la terapia es esencial y urgente si todavía estás reuniendo el coraje para ir a terapia te dejo algunos datos que creo que tendrías que saber:

  • Hay oscilaciones diarias en el cuerpo y en el peso corporal. Si te pesas todo el rato, acabará habiendo un momento del día en que te verás con mayor peso.
  • La sobreingesta voraz muchas veces se hace para calmar otras emociones, como por ejemplo la ansiedad , el aburrimiento o la tristeza. Date un tiempo para analizar de que se trata y ver otra manera de combatir estas emociones.
  • Los problemas de autoestima son centrales en todo esto. Dedica un rato a pensar qué otros temas eran los importantes para ti antes de todo esto y definían tu autoestima.
  • La falta de una alimentación correcta contribuye al pensamiento obsesivo. Tal vez tu manera real de pensar no es esta y ahora mismo es producto de este efecto neuroquímico.
  • · Tienes que tener en cuenta que un peso demasiado bajo puede producir la parada de algunos de tus órganos y por tanto te puede producir grandes problemas de salud.

¿Existen otros trastornos de la conducta alimentaria?

  • Trastorno de atracones. La característica principal, es la presencia recurrente de atracones, en ausencia de conductas compensatorias. Los atracones se caracterizan por comer más rápidamente de lo normal, hasta sentirse desagradablemente lleno, sin sentir hambre, comer solo debido a la vergüenza que se siente por la cantidad que se ingiere y sentirse luego a disgusto con uno mismo, deprimido o muy avergonzado.
  • La Pica es la ingestión de sustancias no nutritivas (p. ej. papel, pelos, cenizas, etc.) de forma persistente. No suele acompañarse de aversión a la comida en general. Este patrón de ingesta presenta complicaciones físicas que pueden llegar a ser graves como por ejemplo obstrucciones intestinales o envenenamiento.
  • El trastorno de rumiación se considera característica la regurgitación repetida de alimentos. Una vez el alimento ha sido parcialmente digerido es devuelto a la boca sin asco ni náuseas. La malnutrición suele estar presente en este trastorno y en ocasiones se rechaza comer fuera de casa para no exhibir estos episodios de regurgitación en público.
  • El trastorno de evitación/restricción de la ingestión de alimentos supone evitar o restringir el alimento, lo cual puede tener consecuencias importantes de pérdida de peso y nutricionales. Aunque se puede producir un importante deterioro físico este no se da por una excesiva preocupación por el peso o la forma corporal.

Tal vez lo que te suceda tenga más que ver con un proceso de ansiedad o depresión. Si quieres puedes informarte en esta misma página para poder comprender mejor lo que sucede.

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